En esta ocasión nuestros pasos se han encaminado a la Sierra de Abanilla, dirección al Zulum.
Una ruta algo más dura de las realizadas normalmente pero ha merecido la pena. La subida ha sido realizada por la rambla de Los Calderones, algo realmente espectacular, pero es imprescindible un buen calzado que se agarre a la roca y no intentarlo nuca cuando tengas la más mínima sospecha de que el suelo puede estar algo mojado.
Ruta en la cual te olvidas de las fotografías, (si eso fuese posible) ya que la atención la centras en donde poner bien los pasos y cuando respiras es para disfrutar de las vistas que te puede permitir una rambla estrecha y de altas paredes en sus laterales.
Una vez superada esa parte, la vista te llega a poder divisar el Mediterráneo en la lontananza, paseando entre pinos (muchos de ellos se encuentran en lamentable estado de sequedad), tenemos la senda bien trazada y el pico de Zulum está muy cerca del sendero que tienes que retomar para dirigirte de nuevo a Abanilla.
1 comentario:
Jo, que envidia me dais.
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